La Culpa Es Del Angel

Recordaba estos días, bajo el sol gesellino, ahora ya de vuelta por mis pagos ramenses, que allá por 1986 existía un programa de radio entre las 16 y las 20 que se emitía por radio El Mundo con la conducción de Alberto Muney, junto a Gonzalez Rivero “Riverito” y Juan Carlos Altavista “Minguito”.

Ese programa, que yo escuchaba todas las tardes desde mi tablero de dibujo en un estudio técnico que por esos años me daba laburo, tenía dos comentaristas que salían al aire desde exteriores, uno de ellos era, un joven Martín Redrado que hablaba desde los EE.UU. y por supuesto, sus comentarios eran sobre economía.

El otro, era un joven médico devenido a comentarista político, que debía soportar ser interrumpido en sus exposiciones por las oposiciones que le planteaba Altavista, desde el personaje de Minguito.

Han pasado más de veinte años de ese programa. Recuerdo que los comentarios que escuchaba de parte de ese mozo eran bastante atinados e imparciales, era un buen observador de la realidad política de ese momento, por lo menos para mí, que por supuesto, ya tenía posición política tomada.

Me pregunto hoy, qué pasó en el medio...

Así que empecé a averiguar

Encontrar la punta del ovillo si está enmarañado, resulta engorroso. Parece que después de dejar radio El Mundo, les recuerdo 1070 del dial, el joven comentarista médico entró en una profunda depresión. Cayó en una automedicación poco conveniente para su verdadero problema. Algunos de sus colegas, que prefieren se omita su nombre, confiesan: “Nelson no podía superar, siendo quien creía que era, haber estado junto a Minguito Tinguitella”

Dicen que, cuando aguardaba lo poncharan al aire, “le resultaba insoportable escuchar los ooochoooo de Riverito, justo él, tan serio siempre”. Ante eso, habría caído en un grupo de autoayuda, luego de su automedicación, que le permitió ir superando su stress. Ese grupo, regenteado por distintos personajes del medio que caían en situaciones similares, se llamaba “Como jaquear potenciales relatos originariamente tolerables”, cuya sigla es “Co.Ja.Po.Rel.Or.To”; tanto fue su entusiasmo, cuenta un vecino del mismo edificio del susodicho, que el curso de autoayuda brindado por Cojaporelorto, que “se le hizo carne”, enfatiza la fuente.

Off de record, algunos colegas de TodoMentira, reconocen que si fuera sólo eso, no habría problema, sin embargo, el problema se agravo hasta llegar al lamentable estado que está hoy.

Un conductor que pide no lo dejen sólo, que suele cruzarse en los pasillos con él, dijo hace poco que el grado de alienación tiene que ver con su nuevo vicio:

Angel, le llaman en privado. Es común que muchos médicos, a pesar de saber el mal que causa, igualmente fumen. Por eso no es de extrañar que el doctor cayera en el vicio, el vicio del Angel.

Cada vez más!, no puede parar. Recurre a él cada 10 minutos. Un conocido toxicólogo indica que “el abuso de Angel, provoca trastornos en la personalidad”, y agrega que “hasta puede ocasionar cambio de roles en la vida”, sumiendo al adicto en un carácter histérico y hasta a veces comportamientos misóginos.

Esta nueva droga, mucho menos conocida que el paco, tiene su origen en la coquetería. Es de venta libre, no tiene prescripción médica si la usa el destinatario original, pero se cae en complicaciones cuando se desvirtúa su uso. La propia madre de Nelson lo usaba y jamás tuvo problemas.

El tema es que Angel Face es un polvo para el cutis femenino.

Convengamos lo siguiente, si él en sus crónicas abusa de fuentes secretas, diálogos nunca comprobados, acciones de las que no hay testigos, y se le da fiabilidad, tanto que lo publican en los Grandes Medios de Desinformación, por qué esto no podría ser verdad...

De que censura me hablás Masanés!!! Si laburás en Radio Nacional (todos los lunes de 18 a 20, por Nacional Clásica)



Comentarios

La Pipi ha dicho que…
jaja, muy buen raconto... fue patético (como siempre) verlo en Palabras +-

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